A lo largo de los
últimos meses, y aprovechando nuestra experiencia en el alquiler de equipos de sonido en Madrid norte, hemos publicado
en este blog algunos consejos para elegir los diferentes elementos de un equipo
de sonido, curiosidades sobre ellos, etc. Hemos hablado en diferentes ocasiones
de los micrófonos y los diferentes tipos que existen pero, hasta el momento, nunca
nos habíamos detenido a contarte cuándo se inventaron y cómo fueron
evolucionando a través del tiempo.
El primer micrófono de la historia, patentado en 1876 era muy
parecido a una pequeña taza. De hecho, en su interior había un líquido, ácido
sulfúrico mezclado con agua, en el que se introducía una aguja conectada a un
cable. Al producirse un sonido el líquido vibraba produciendo una alteración en
la resistencia eléctrica del líquido que era captada por la aguja metálica. De
este modo las vibraciones del sonido podían convertirse en una señal eléctrica.
Lógicamente, dada la peligrosidad del ácido sulfúrico, esos
primeros micrófonos no eran en absoluto funcionales y no se podían trasladar
con facilidad. Pocos años después un investigador inglés, David Edward Hughes,
consiguió convertir el sonido en electricidad utilizando dos finas placas
metálicas separadas por minúsculos granos de carbón.
Pero desde esos primeros modelos a los que hoy puedes
encontrar en el catálogo de cualquier empresa dedicada al alquiler
de equipos de sonido en Madrid norte aún había mucho camino por recorrer. En 1916 se patentó
el primer micrófono de condensador que contribuyó al auge de las emisiones
radiofónicas en todo el mundo.
La irrupción de los transistores supuso el nacimiento de la
electrónica que supuso una revolución tanto en los micrófonos como en
otros muchos ámbitos. Pero de ellos te hablaremos en próximos artículos del
blog de Alqui-Tele.